Ir al contenido principal

Patrimonio de la Humanidad

No voy a disparar contra la UNESCO... bueno, sí, si lo voy a hacer, y contra todos los que creo han equivocado lo que debe ser la gestión y conservación del patrimonio mundial.


Cada año en verano se publica una lista con todo aquello viejo que la humanidad (representada por aquellos que se han autoproclamado sus representantes) decide que es su patrimonio. La definición es de por sí un tanto estúpida, porque si atendemos a la definición del patrimonio nos encontramos lo siguiente:

patrimonio

s. m.
1   Conjunto de bienes que una persona adquiere por herencia familiar: su patrimonio se calcula en millones de euros.
2   Conjunto de bienes que posee una persona o una institución y que son susceptibles de estimación económica: el patrimonio histórico-artístico de un país; muchas obras de arte pertenecen al patrimonio de la Iglesia; las playas forman parte del patrimonio del estado.
3   Cosa material o inmaterial que es propia de algo o de alguien: las tradiciones forman parte de nuestro patrimonio cultural.


Por eso mismo, por la no propiedad de algunos de los bienes declarados como tal, no deberíamos tan alegremente declarar las cosas que nos son propias. Me explico: El cien por cien de los bienes patrimoniales o naturales declarados patrimonio de la humanidad tienen un propietario que no es "la humanidad", si no alguna institución, persona, nación u organización. Eso hace que el nombre sea ambiguo, máxime cuando no existe ninguna medida efectiva para garantizar la preservación de esos bienes. El que no esté de acuerdo que teclee Palmira en su buscador y que compruebe lo que ha hecho una parte de la humanidad con el sitio.


Por otra parte la lista empieza a ser arbitraria y repetitiva. Arbitraria porque se imponen limitaciones a los países para presentar sus candidaturas y no se hace un esfuerzo activo para que todas esas instituciones que mexan por* nos luego nos traten de convencer de que está lloviendo. Repetitiva porque entre los bienes incluidos en los listados empieza a haber muchos que ya están repetidos.


Creo que si la UNESCO quiere proteger los yacimientos de la Hispania romana  lo que debería hacer es declarar los yacimientos arqueológicos hispano-romanos bienes a conservar, proteger y difundir, de una forma conjunta. Es como lo de las 18 Semanas Santas de interés turístico internacional o lo de declarar cada bien de la España andalusí como Patrimonio Mundial de forma independiente: No tiene ningún sentido.


Desde mi personal punto de vista se debería tener una visión global y luego que cada ente gestor de cada monumento siguiera las directrices generales de cada época, área, zona, espacio, arte o cultura en el que estuvieran incluidos sus bienes y lo gestionara de forma independiente.


Como ejemplo decir que entiendo lo del románico catalán o lo del Camino de Santiago, por su singularidad como fenómeno o como estilo arquitectónico, pero que no entiendo esa misma declaración para un dolmen en concreto cuando hay otro igual a cien kilómetros.


En España tenemos en la lista de referencia a conjuntos como la Ribeira Sacra o al PatrimonioIndustrial del Ferrol de la Ilustración. El caso del primero sí es un fenómeno singular y no repetido, pero el Ferrol de la Ilustración es parte y fruto de toda la arquitectura y arte de ese momento histórico ¿Se imaginan a España presentando "La Ilustración Española"? Sería irrechazable e incluiría cientos o miles de bienes inventariados, materiales e inmateriales en los que estaría incluida la obra filosófica y literaria del momento, su arte (no sólo la arquitectura), su forma de vestir, de comer o de vivir.


sólo desde un punto de vista global se conseguirá una pedagogía que acerque a la Humanidad a ese momento histórico, y no la mera visita a sus edificios. El día que en mi Ferrol nos decidamos a no incluir sólo los bienes arquitectónicos si no a impulsar de forma definitiva el estudio de la época de un modo global, con congresos, museos, una cátedra, publicaciones, ferias, el apoyo de todas las instituciones y de la Universidad de la Coruña y su Facultad de Humanidades el camino estará andado, y si la UNESCO cree que no es Patrimonio Mundial pues mejor que mejor: Así será nuestro patrimonio.


En cualquier caso creo que si no queremos desvirtuar la singularidad de los bienes considerados algo especial y singular y además digno de conservarse y respetarse deberíamos empezar a nominar conjuntos más amplios y extendidos en un contexto.


Y creo que lo de los espacios naturales es una soberana bobada: Siempre hay que conservar la naturaleza, porque cada espacio, en su singularidad y riqueza, es la herencia que nuestros padres dejaron a nuestros hijos.



Comentarios

Entradas populares de este blog

Demasiados talveces, demasiados quizases.

Es una mañana bonita, con los rayos de sol colándose entre nubes de colores, de esas que siempre aparecen después de la tormenta. La ciudad está dormida, como la Vetusta de Clarín, y sin embargo ya algunos leen la prensa con un café, otros pasean y algunos peregrinos comienzan su viaje con la expectativa de que al final se encontrarán a sí mismos al divisar las torres de la Catedral de Santiago. Ferrol es un punto de partida, que duda cabe: De Ferrol han partido barcos desde que empezaron a hacerse, peregrinos desde que se encontró la tumba de Santiago el Mayor, ferrolanos desde que los marinos hicieron de la ciudad una de sus sedes. Hoy, se dice que hay 15.000 ferrolanos que viven dispersos por el mundo, e incluso hay quien asegura que se podría hacer un programa dedicado sólo a esos emigrantes que no se sabe por qué, hicieron de la canción de Santi Santos su himno y su filosofía de la vida. Yo ya marché y ya volví, y nunca juré que no lo haría. Vivir fuera es tal vez la mejor vacu

Querido Javier... o querido Ignacio.

Estoy dándole vueltas acerca de a quién escribirle esta carta, porque ya me estoy cansando de que nadie me responda. Empecé con Mel Gibson, luego fue Antonio Banderas, Amenábar... creo. Nada, que nadie me responde, y encima Scarlett Johanson no se ha comprado un piso en Ferrol, pero voy a probar otra vez, a ver qué pasa esta vez. Si la carta fuera para Javier Gutierrez le diría que empiece a abandonar su discreción y se compre un casoplón y publique alguna foto en los mejores restaurantes de la ciudad, o en donde le dé la gana pero que sean sitios que molen, y que vaya pensando en producir alguna película (y protagonizarla) en la que nuestra ciudad esté presente. En cambio, si la carta fuera para Ignacio Rivera,en cambio, le diría que vaya a conocer a Marcial Pita y a su proyecto Astillero en Esmelle. ¿Que por qué? Pues porque los señores de Estrella Galicia están invirtiendo en vios una mantecá y bajo la marca Ponte da Boga, ya están sacando unos monovarietales que, conociendo a Don

De prólogos y epílogos.

Desde mi más tierna infancia y desde hace generaciones, las fiestas de la Natividad de Jesús marcan un fin de ciclo en la vida de millones de personas. El año nuevo cristiano trasciende las creencias y tiene algo de metamorfosis en el que tanto de forma individual como colectiva, muchos se proponen enmendar los errores del pasado y mejorar en lo venidero. Muchos somos una excepción y nos agarramos al "Virgencita, Virgencita, que me quede como estoy" en lo personal, pero Ferrol no vive su mejor momento, y eso es algo que para muchos es una parte consustancial a nuestra vida. Sí: La crisis es algo en lo que muchos ferrolanos han nacido, crecido y vivido, e incluso hay quien no recuerda un Ferrol ajena a ello... Pero crisis es un término que tuvo un significado que es al que debemos agarrarnos: el cambio. Hemos cambiado desde siempre, o al menos desde que somos lo que somos; nacimos para hacer barcos y dar cobijo a las naves de la Armada Real, y eso es también consustancial

Una rodaja del Mistral

Esto de los blogs se complica cada día, y por eso sólo voy a escribir una breve nota de algo que no va a pasar: El Museo Naval de Ferrol y EXPONAV han solicitado a la Armada que, una vez se concluyan la desmilitarización y baja en la Armada del submarino Mistral, les sea proporcionada una rodaja del mismo para que sea musealizada y visitable. Se está a la espera de la respuesta. Y del envío.

El tiempo que pasa, inexorable.

1. El Alvia.  Como si fuera un punto de fuga en un cuadro de Tintoretto lo primero que me atrajo aquella muy temprana mañana de verano, húmeda y lluviosa, fueron esas velas que recordaban la tragedia pasada hacía muy pocos días en Angrois. Yo estaba a punto de coger el mismo tren, el Alvia de Madrid, pero en el sentido inverso de la marcha. Reinaba cierta conmoción en la estación, pese a estar prácticamente vacía. Después de equivocarme de tren y estar a punto de acabar al otro extremo de España ocupé al fin mi asiento y me dispuse a disfrutar del viaje. A mí me encanta viajar en tren y ese trayecto era completamente nuevo para mí, ya que mi último viaje desde La Coruña fue por la vía antigua. El brusco descenso de la velocidad del convoy me indicó que ya estábamos llegando a la famosa curva y afiné mi atención. Como siempre cierto pudor me hizo dudar por un instante, pero al final la visión del punto exacto del desastre me hizo santiguarme y pedir en muda oración por las alma