Entre la pena y la rabia, sí: Así me siento cuando día tras día la escasa prensa que trata de parecer algo objetiva anuncia los datos de población de Ferrol como si fueran las estadísticas de un partido de fútbol. Fulano ha hecho tantos pases, mengano ha cortado tres balones al área, el portero apenas ha intervenido, Ferrol ha vuelto a perder 700 habitantes... ¿Tan poco nos importa comprobar cómo la ciudad va envejeciendo hasta el punto de que nuestros ancianos mueren sin que nadie esté allí para sujetar su mano en el último momento? ¿Tan miserables nos hemos vuelto? ¿Somos tan malnacidos y egoístas que somos incapaces de conmovernos ante la escalofriante realidad que nos lleva a uña de caballo hacia la población de un pueblo? El otro día me encontré en Twitter un comentario de una diputada regional de VOX en Madrid en el que se enlazaba a un artículo que explicaba que Beatriz Sestayo, hace ya unos años, tachó de machista, homófoba y facha la propuesta de ley del PP para impulsar de...
Llega un momento en la vida en que empiezas a creer que la palabra es importante. Estas son mis armas para luchar por y para tratar de mejorar el mundo.