Intentar escribir siempre girando en torno a pocos temas es a veces tan cansado como leer acerca de esos temas. En ese sentido me siento un poco como los políticos, que suelen dar vueltas a lo mismo hasta que el tema se agota.
En estos años creo que he escrito acerca de casi todo lo que pasa o hay en Ferrol, con dispares éxitos en cuanto a la difusión de mis ideas. Como ya sabéis que no me importa especialmente no tener éxito (tenerlo me encanta, en cambio), yo sigo erre que erre dándole vueltas a la madeja a ver si alguna de las propuestas que hago salen adelante; o mejor aún: Otras mejores.
Hay ciertos ejes sobre los que pivoto con cierta regularidad: El patrimonio ilustrado de la ciudad, el Camino Inglés, la música, la gastronomía, la pintura y la naturaleza... tal vez porque en el fondo forman parte de un bucle que ya he explicado varias veces pero que os refresco: La naturaleza generó que los primeros peregrinos utilizaran Ferrol como puerto refugio, también la creación de los arsenales y las defensas, favoreció el desarrollo de la gastronomía local (que se vio reforzada por el cosmopolitismo que nos dio ser un puerto importante) y la unión de todo ello y el continuo tránsito de gentes y de sus ideas generó que Ferrol no sea Vigo, Malpica de Bergantiños ni Monforte de Lemos: Ferrol es uno de los puertos más seguros y protegidos del mundo y está en la Cornisa Cantábrica, que ha sido desde hace casi tres milenios paso obligado para aves y para navegantes.
Dependemos demasiado de los de fuera (de Madrid, de Santiago, de Coruña, de Bruselas...), pero esa es una mala costumbre que deberíamos desechar. Me vais a permitir que os ponga algunos ejemplos.
- Ferrol tiene un puerto de interés general del estado que mueve más de doce millones de toneladas al año de mercancías. En Galicia sólo es superado por Coruña, pero lo es por muy poco y veremos si lo sigue sieno cuando se deje de descargar carbón para la central térmica de Meirama. ¿Lo sabe alguien? ¿A alguien le importa? ¿Es alguien consciente de que la actual infraestructura está planteada para mover el doble de mercancías al año y convertirse en el primer puerto del norte de España? Bien, pues siendo la Autoridad Portuaria un ente público que depende de varios ministerios y en el que el municipio tiene representación, podríamos pensar que se nos está dejando un poco de lado en ciertos temas.
- Ferrol tiene monumentos (muchos) que casi en cualquier ciudad merecerían por si solos la visita. Entre todos ellos sobresalen San Felipe y la Sala de Armas, que tras una polémica restauración se convirtió en una residencia para marineros. Con respecto a San Felipe sólo puedo decir que en cualquier aldea tendría su festival, su bar, su museo, su aparcamiento, unos buenos accesos, su tienda de recuerdos y seguramente un hotel o un parados de turismo. En Ferrol las clases dominantes siguen creyéndose que público significa que sólo ocasione gastos, y seguramente por eso no ha habido un político que haya siquiera intentado dotarlo (para empezar) de un local de hostelería, organizar eventos o dotarlo de unos servicios dignos. En San Esteban de Rivas do Sil hay un Parador Nacional que está considerado el mejor de España, y está aislado del mundo por carretera, tren, mar y aire (imaginémonos por un momento que Monfero fuera restaurado... bueno, lo dejo que me pierdo).
- Ferrol tiene una Semana Santa que lleva años declarada "de Interés turístico Internacional". Incluso yo, que me vacuné contra la titulitis hace décadas, reconozco que desde entonces es habitual observar a foráneos contemplando unas procesiones cuyos organizadores no han heho más que mejorar desde hace años. Conozco ciudades en las que sus procesiones son respetadas por todos y tratadas como la ingente fuente de ingresos que son. En Ferrol todavía hay quien las desprecia y las ataca públicamente por ser parte de un hecho religioso.
- Ferrol es punto de partida de uno de los caminos históricos a Santiago. Con una ceguera muy propia de estos lares, los mandatarios municipales no han tenido a bien hasta la fecha hacer nada para aprovecharlo. No deja de ser sorprendente que dos de los itinerarios hayan sido reconocidos por la UNESCO como Patrimonio Mundial y que no lo hayan sido todos, pero aunque no lo fuéramos nunca los peregrinos ya se cuentan por miles, y seguramente más pronto que tarde superemos los veinte mil anuales, dándose la circunstancia de que una gran parte de ellos son extranjeros. Ni que decir tiene que hay poblaciones pequeñas en las que se puede decir que todos viven del Camino: En Ferrol no creo que viva ni una sola persona.
- En prácticamente todas las ciudades de Galicia hay alguna fiesta gastronómica de cierta importancia; en Ferrol hay una bienal dedicada al vino (producto siempre foráneo, puesto que aquí no hay más que un pequeño viñedo en Esmelle). Que tengamos almejas, vieiras, zamburñas, pulpo, centollos, nécoras y pescados de bajura de tanta calidad como cualquiera no ha movido a nadie a tratar de exaltarlos; de hecho no hay apenas locales dedicados a mimar estos productos. Pasa lo mismo con los excepcionales alimentos de la comarca: Los pimientos, las verduras, la carne, las empanadas, el pulpo, el pan, las bollas, los quesos, la carne, los huevos, la miel... son patrimonio de otros, aunque nosotros los degustemos con fruición a sabiendas de que pocos son comparables.
Y es que te das un paseo por la comarca y ves desde cachenas hasta ovejas, campos de maíz, frutales, huertos, pastos, pequeños pesqueros de bajura... y te da la impresión de que alguien se va a dar cuenta de que vivimos rodeados de delicatessen... pero no: Aquí preferimos coger el coche y gastar nuestro dinero en otro sitio.
- En Ferrol hay cuatro museos, cosa que no creo que pueda decir casi ninguna ciudad de menos de 70.000 habitantes. Y aunque dos están muy relacionados y hasta hay quien cree que son el mismo, lo cierto es que acumulan miles de visitantes todos los años gracias al buen hacer de sus gestores y a lo interesante de sus fondos.
¿Y sabéis qué? Que no me preocupa nada: El potencial está ahí, saliendo de la caverna para dejar de ser una sombra y brillar como se merece, y lo cierto es que cada paso que damos no tiene vuelta atrás. Por eso estoy seguro de que no solo no vamos a desaparecer o a permanecer siempre en esta crisis que ya lleva tres décadas, sino que me apuesto con todos y cada uno de vosotros que en menos de quince años vamos a estar de moda y nuestro problema va a ser cómo gestionar los visitantes.Y lo sé porque aunque la marina se lleve a todos los almirantes, NAVANTIA deje de hacer barcos y nunca tengamos un tren en condiciones, los ferrolanos somos gente forjada entre el fuego de las herrerías y la lluvia que nos protege, y somos sangre de mil leches que hemos recorrido los siete mares y más continentes de los que en realidad existen. Y eso, nunca lo olvidéis, imprime carácter. Vaya si lo imprime.
-
En estos años creo que he escrito acerca de casi todo lo que pasa o hay en Ferrol, con dispares éxitos en cuanto a la difusión de mis ideas. Como ya sabéis que no me importa especialmente no tener éxito (tenerlo me encanta, en cambio), yo sigo erre que erre dándole vueltas a la madeja a ver si alguna de las propuestas que hago salen adelante; o mejor aún: Otras mejores.
Hay ciertos ejes sobre los que pivoto con cierta regularidad: El patrimonio ilustrado de la ciudad, el Camino Inglés, la música, la gastronomía, la pintura y la naturaleza... tal vez porque en el fondo forman parte de un bucle que ya he explicado varias veces pero que os refresco: La naturaleza generó que los primeros peregrinos utilizaran Ferrol como puerto refugio, también la creación de los arsenales y las defensas, favoreció el desarrollo de la gastronomía local (que se vio reforzada por el cosmopolitismo que nos dio ser un puerto importante) y la unión de todo ello y el continuo tránsito de gentes y de sus ideas generó que Ferrol no sea Vigo, Malpica de Bergantiños ni Monforte de Lemos: Ferrol es uno de los puertos más seguros y protegidos del mundo y está en la Cornisa Cantábrica, que ha sido desde hace casi tres milenios paso obligado para aves y para navegantes.
Dependemos demasiado de los de fuera (de Madrid, de Santiago, de Coruña, de Bruselas...), pero esa es una mala costumbre que deberíamos desechar. Me vais a permitir que os ponga algunos ejemplos.
- Ferrol tiene un puerto de interés general del estado que mueve más de doce millones de toneladas al año de mercancías. En Galicia sólo es superado por Coruña, pero lo es por muy poco y veremos si lo sigue sieno cuando se deje de descargar carbón para la central térmica de Meirama. ¿Lo sabe alguien? ¿A alguien le importa? ¿Es alguien consciente de que la actual infraestructura está planteada para mover el doble de mercancías al año y convertirse en el primer puerto del norte de España? Bien, pues siendo la Autoridad Portuaria un ente público que depende de varios ministerios y en el que el municipio tiene representación, podríamos pensar que se nos está dejando un poco de lado en ciertos temas.
- Ferrol tiene monumentos (muchos) que casi en cualquier ciudad merecerían por si solos la visita. Entre todos ellos sobresalen San Felipe y la Sala de Armas, que tras una polémica restauración se convirtió en una residencia para marineros. Con respecto a San Felipe sólo puedo decir que en cualquier aldea tendría su festival, su bar, su museo, su aparcamiento, unos buenos accesos, su tienda de recuerdos y seguramente un hotel o un parados de turismo. En Ferrol las clases dominantes siguen creyéndose que público significa que sólo ocasione gastos, y seguramente por eso no ha habido un político que haya siquiera intentado dotarlo (para empezar) de un local de hostelería, organizar eventos o dotarlo de unos servicios dignos. En San Esteban de Rivas do Sil hay un Parador Nacional que está considerado el mejor de España, y está aislado del mundo por carretera, tren, mar y aire (imaginémonos por un momento que Monfero fuera restaurado... bueno, lo dejo que me pierdo).
- Ferrol tiene una Semana Santa que lleva años declarada "de Interés turístico Internacional". Incluso yo, que me vacuné contra la titulitis hace décadas, reconozco que desde entonces es habitual observar a foráneos contemplando unas procesiones cuyos organizadores no han heho más que mejorar desde hace años. Conozco ciudades en las que sus procesiones son respetadas por todos y tratadas como la ingente fuente de ingresos que son. En Ferrol todavía hay quien las desprecia y las ataca públicamente por ser parte de un hecho religioso.
- Ferrol es punto de partida de uno de los caminos históricos a Santiago. Con una ceguera muy propia de estos lares, los mandatarios municipales no han tenido a bien hasta la fecha hacer nada para aprovecharlo. No deja de ser sorprendente que dos de los itinerarios hayan sido reconocidos por la UNESCO como Patrimonio Mundial y que no lo hayan sido todos, pero aunque no lo fuéramos nunca los peregrinos ya se cuentan por miles, y seguramente más pronto que tarde superemos los veinte mil anuales, dándose la circunstancia de que una gran parte de ellos son extranjeros. Ni que decir tiene que hay poblaciones pequeñas en las que se puede decir que todos viven del Camino: En Ferrol no creo que viva ni una sola persona.
- En prácticamente todas las ciudades de Galicia hay alguna fiesta gastronómica de cierta importancia; en Ferrol hay una bienal dedicada al vino (producto siempre foráneo, puesto que aquí no hay más que un pequeño viñedo en Esmelle). Que tengamos almejas, vieiras, zamburñas, pulpo, centollos, nécoras y pescados de bajura de tanta calidad como cualquiera no ha movido a nadie a tratar de exaltarlos; de hecho no hay apenas locales dedicados a mimar estos productos. Pasa lo mismo con los excepcionales alimentos de la comarca: Los pimientos, las verduras, la carne, las empanadas, el pulpo, el pan, las bollas, los quesos, la carne, los huevos, la miel... son patrimonio de otros, aunque nosotros los degustemos con fruición a sabiendas de que pocos son comparables.
Y es que te das un paseo por la comarca y ves desde cachenas hasta ovejas, campos de maíz, frutales, huertos, pastos, pequeños pesqueros de bajura... y te da la impresión de que alguien se va a dar cuenta de que vivimos rodeados de delicatessen... pero no: Aquí preferimos coger el coche y gastar nuestro dinero en otro sitio.
- En Ferrol hay cuatro museos, cosa que no creo que pueda decir casi ninguna ciudad de menos de 70.000 habitantes. Y aunque dos están muy relacionados y hasta hay quien cree que son el mismo, lo cierto es que acumulan miles de visitantes todos los años gracias al buen hacer de sus gestores y a lo interesante de sus fondos.
¿Y sabéis qué? Que no me preocupa nada: El potencial está ahí, saliendo de la caverna para dejar de ser una sombra y brillar como se merece, y lo cierto es que cada paso que damos no tiene vuelta atrás. Por eso estoy seguro de que no solo no vamos a desaparecer o a permanecer siempre en esta crisis que ya lleva tres décadas, sino que me apuesto con todos y cada uno de vosotros que en menos de quince años vamos a estar de moda y nuestro problema va a ser cómo gestionar los visitantes.Y lo sé porque aunque la marina se lleve a todos los almirantes, NAVANTIA deje de hacer barcos y nunca tengamos un tren en condiciones, los ferrolanos somos gente forjada entre el fuego de las herrerías y la lluvia que nos protege, y somos sangre de mil leches que hemos recorrido los siete mares y más continentes de los que en realidad existen. Y eso, nunca lo olvidéis, imprime carácter. Vaya si lo imprime.
-
Comentarios
Publicar un comentario